Sindicato de Trabajadores de Salud y Frente Nacional de Lucha, unidos contra el Trabajo Infantil en Guatemala.

lunes, 1 de agosto de 2011

Las presiones y acuerdos del Frente Nacional de Lucha siguen haciendo eco...

Mercado sustituye a la escuela

Las autoridades hacen frecuentes operativos en Antigua Guatemala, Sacatepéquez, para prevenir que comerciantes del mercado y sus alrededores obliguen a trabajar a sus hijos en los negocios, en lugar de enviarlos a la escuela; sin embargo, esta situación persiste.

POR ANA CHRISTINA CHACLáN Y MIGUEL LóPEZ Sacatepéquez
ANTIGUA GUATEMALA- Hace dos semanas 25 menores de edad —niños y adolescentes— fueron localizados por las autoridades cuando vendían productos en el mercado de Antigua Guatemala, tras lo cual los progenitores se comprometieron a enviarlos a la escuela.
“Ninguno de los menores fue retenido, pero los padres firmaron el compromiso de enviarlos a la escuela o guardería del Estado”, indicó Claudia Vanesa Rodas, delegada de la Procuraduría General de la Nación (PGN) local.
Que no trabajen
La funcionaria refirió que los niños y adolescentes no tienen por qué atender negocios, pues el compromiso así lo estipula. “El acuerdo no fue que al cumplir con un horario de clases en las escuelas los niños laboraran en los comercios de sus papás”, señaló Rodas.
Detalló que las leyes del país solo permiten el trabajo a menores cuando estos han cumplido 14 años, y las labores que desempeñen sean de aprendizaje de un oficio.
Rodas añadió que el operativo que efectuaron hace dos semanas —con la participación de la Policía Nacional Civil, Policía Municipal y Procuraduría de Derechos Humanos— fue preventivo, para verificar que no se violen los derechos de la niñez.
Los menores fueron devueltos a sus padres, luego de que estos firmaran el compromiso. “Si no lo cumplen vamos a tener que aplicar la judicialización”, dijo Rodas al advertir de que se le podrían formular cargos a los progenitores irresponsables.
La delegada expuso que en lo que va del año han rescatado a seis niños que eran abusados por sus familiares. Las edades están comprendidas entre los 3 y 16 años. Fueron llevados a un hogar de protección y abrigo, mientras se decide su situación en los tribunales, expuso Rodas.

jueves, 14 de julio de 2011

La presion del FNL comienza a dar efectos positivos

Instituciones apoyan a niños trabajadores

Veinticinco niños que se ganan la vida lustrando calzado en el parque La Unión, en Totonicapán, participaron en un taller organizado por el Ministerio de Trabajo, a fin de reducir la explotación infantil.

POR ÉDGAR DOMÍNGUEZ Y FERNANDO MAGZUL
La actividad fue apoyada por el Ministerio de Salud, La Policía Nacional Civil (PNC), el Ministerio de Educación y la organización Conrado de la Cruz, que realizaron actividades recreativas y de motricidad, entre otras.
La delegada del Ministerio de Trabajo, Eugenia Tzunún, informó que reunieron a niños que trabajan de vendedores ambulantes y lustrabotas.
“Realizamos un monitoreo para determinar cuántos niños se dedican a trabajar y si sufren algún tipo de violencia, y cuántos estudian, para ver de qué manera se les puede apoyar”, explicó.
“Los papás se muestran renuentes a enviar a sus hijos a estudiar, y la necesidad de ingresos para sostener a la familia es la causa principal de que muchos niños trabajen para contribuir a cubrir los gastos de la casa, y eso les niega el derecho a la educación”, expresó la funcionaria.
Eddy Chan, supervisor del Ministerio de Trabajo, indicó que otro de los objetivos es la erradicación del trabajo infantil en esa región.
“Es una labor ardua, pero estamos dando el primer paso y esperamos que al esfuerzo se unan instituciones que accionan en favor de la niñez, para tener mejores resultados”, dijo.
Ninssy Quibaja, de la Sección de Prevención del Delito de la PNC, señaló que el trabajo que hacen las instituciones tendrá un impacto positivo en la formación de los niños, porque en las calles están expuestos al peligro.
Según la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida, efectuada en el 2006 por el Instituto Nacional de Estadística, unos 528 mil niños y niñas de entre 7 y 14 años realizan trabajos, como picar piedra, fabricar juegos pirotécnicos, vender alimentos y golosinas, entre otros.

“Explotación infantil en Xelajú es crítica”

Magnolia Orozco, delegada de la Procuraduría General de la Nación (PGN) de la región occidente, afirma que existe una situación crítica de la niñez en la ciudad altense, ya que gran cantidad de menores sufre explotación laboral, maltrato familiar y abandono, lo que les resta posibilidad de desarrollarse en forma integral.

POR ANA CRISTINA CHACLáN
¿Puede describir la situación de la niñez en Xelajú?
Hay un buen número de niños y niñas que trabajan en las calles y no asisten a la escuela. Bastantes son víctimas de abuso físico, psicológico y hasta sexual.
¿Qué derechos se les vulnera?
El derecho a un nivel de vida adecuado, ya que la familia no le proporciona buena educación académica, alimentación ni vivienda confortable.
A algunos se les niega el derecho a la familia, ya que los dejan abandonados en hospitales o en la calle. La mayoría de casos, en condiciones lamentables.
También se les impide los derechos a la vida, a la recreación, al deporte y a su desarrollo social integral.
A otros se les niega su derecho a la identidad, pues los padres no los inscribieron en el Registro Civil —ahora Registro Nacional de las Personas—, y de esta manera no quedan reconocidos con nombre y apellido.
¿Cuántos casos de explotación de niños conocen?
De enero de este año a la fecha manejamos 397 casos que han sido llevados a la instancia judicial, y otros 58 que han sido conciliables. Estos son llamados así porque no hay vulneración de un derecho y el daño puede restituirse en forma inmediata.
¿Es difícil erradicar el problema de niños trabajadores?
Sí, debido a las necesidades familiares o por situaciones culturales. Es un hecho que la mayoría de niños del área rural es enviada a trabajar por sus padres, para ayudar a sostener el hogar. La mayoría proviene del área rural de Totonicapán, pero también hay de Quiché y Quetzaltenango.
¿Por qué no los rescatan?
Porque no todas las organizaciones que tienen que involucrarse cuentan con lo necesario para poder resguardar a un niño. Aquí en Quetzaltenango no tenemos mucho espacio para abrigarlos, tampoco se cuenta con suficiente presupuesto para alimentarlos y, lastimosamente, no siempre el personal responsable de estas operaciones tienen suficientes ganas.
¿Están tomando acciones para contrarrestar esta situación?
Actualmente, coordinamos con el Ministerio de Trabajo, por medio de la Inspectoría de Trabajo de Quetzaltenango, donde se formó una subsecretaría para erradicar el trabajo infantil, en la que participan la PGN y otras dependencias del Estado, con la que se busca establecer algunas medidas para disminuir el trabajo infantil.
¿Solo las dependencias del Estados deben velar por la no explotación infantil?
No, todos tenemos la obligación de velar por los niños, si se establece que uno de ellos está sufriendo, está en riesgo inminente —atentar contra su derecho a la vida, a la seguridad, a la integridad—, o que se le está vulnerando en forma física, psicológica o sexual, tenemos la obligación de presentar la denuncia a las autoridades correspondientes.
¿En dónde se puede presentar la denuncia?
En la Policía Nacional Civil, en la Procuraduría de los Derechos Humanos, la Gobernación, la Secretaría de la Presidencia, la Municipalidad y los ministerios de Trabajo, Salud y Cultura.
La población también puede colaborar en la erradicación de la explotación infantil al no dar dinero a los niños que mendigan, y a no utilizar los servicios o comprar los productos que ofrecen, ya que son adultos quienes los obligan a hacerlo.
Si un niño es maltratado de cualquier manera, el ciudadano tiene la obligación de denunciarlo ante cualquier institución encargada o llamando a los teléfonos de la PGN, 77675103 y 77675702.

martes, 28 de junio de 2011

DUELE: TRABAJO INFANTIL EN GUATEMALA


Según la OIT, Guatemala tiene la cifra más alta de trabajo infantil en Centroamérica con un millón de niños afectados, de los cuales 12.000 tienen entre 5 y 7 años y un 56 % es indígena, datos que han permanecido inamovibles en la última década.
Según la OIT, en América Latina más de 9 millones de niños realizan actividades peligrosas – más del 7 % de la población infantil de la región- y esas labores están relacionadas especialmente con agricultura, pesca, servicio doméstico, minería, ventas ambulantes y cosecha de hoja de coca.
La organización internacional define como trabajo peligroso a toda labor que se desarrolla en un entorno cuyas deficiencias pueden causar daños en la salud, la seguridad o la moralidad de los niños.

FUENTE:http://www.infolatam.com/2011/06/12/mas-de-9-millones-de-ninos-en-latinoamerica-realizan-trabajos-peligrosos/

Los niños, debieran viir una etapa de crecimeinto, con alimento, salud, vestido y educación. Son el futuro del mundo, muchas veces no pueden ir a la escuela, porque se sustentan ellos, o ayudan al sustento de su familia. Esto todos sabemos, no debiera ser así: DUELE

jueves, 5 de mayo de 2011

Desnutrición infantil se extiende por falta de alimentos

 Desnutrición infantil se extiende por falta de alimentos

● Antes del 2009 la falta de alimentos comenzaba a ocasionar problemas alimentarios desde cada junio.

A partir de ese año —sobre todo en el 2011— la desnutrición aguda comenzó a afectar la vida de miles de niños en el área rural, incluso con la muerte. Sin embargo, la etapa crítica por escasez de alimentos aún está por llegar.

“Con las tortillitas se conforma uno, porque ya alimento grande no se consigue en estos lugares. Les damos a los niños lo que se puede”, expresa Marta Cahuec, de Las Sidras, San Agustín Acasaguastlán, El Progreso.

Marta es madre de 11 niños, a quienes sostiene con lo poco que gana su esposo. Entre sus hijos se encuentra Ángel, de seis meses y quien sobrevive a dos más que murieron por desnutrición.

Esa no es la única familia afectada por ese flagelo en Las Sidras. Líderes comunitarios se han organizado para evitar que la falta de alimentos los afecte más, puesto que ya hay varias familias con hijos desnutridos registrados.

Uno de los casos más críticos es quizá el de Zulma Ramos, de 2 años. En las últimas tres semanas, además de estar desnutrida, padece una grave infección en el oído, y en lugar de subir de peso, baja.

Los pocos alimentos que hay para su familia apenas alcanzan, ya que la madre, Carmela López, también debe dar de comer a otros cuatro menores.

Niños fallecidos

Según Cecilia Aguirre, auxiliar de la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH), en Jalapa ya se reportan dos muertes de niños, por desnutrición.

La PDH registra 188 casos de menores que aún viven con ese problema en ese departamento, aunque el hospital local solo ha atendido a 84.

Entre esos niños se encuentra s Wilson Castro, hermano gemelo de Wílmer, de un mes de vida. Ambos viven en San Pedro Pinula, Jalapa.

Wilson pesó seis onzas cuando nació, y su hermano, cinco. Debido a que Wílmer necesita más leche materna, Wilson ya no recibe la suficiente, ya que la madre también está desnutrida, por lo que ha caído en un cuadro crítico en apenas un mes.

Ahora necesita leche de fórmula, pero la pobreza de la familia Castro no permite alimentarlo como corresponde, ya que este año no pudieron obtener ni un quintal de maíz de sus siembras, y la familia con seis hijos solo vive del trabajo del padre.

Este grupo familiar ha sufrido las consecuencias de la desnutrición, que ya le ha quitado la vida a tres de sus hijos, y otros seis van a la escuela muchas veces sin desayunar, y a la cama, sin haber cenado.

“Solo le pido a Dios que me dé fuerzas para verlos grandes”, dice con tristeza Olimpia Pérez, madre de los gemelos, mientras al mediodía en su cocina ya no arde el fuego.

A pocos metros de la casa de Pérz, construida con varas de bambú, se encuentra la de Marta Arias, quien también ya perdió a un niño a causa de la desnutrición.

Su hija Marlyn, de 1 año, casi sale de un cuadro agónico, pero la pérdida de las siembras del año pasado no asegura que pueda darle de comer lo suficiente para que se recupere.

También en occidente

No solo el oriente es afectado por la escasez de alimentos y tiene niños desnutridos; el occidente también tiene lo propio.

En la Municipalidad de San Andrés Itzapa, Chimaltenango, durante una visita efectuada por Prensa Libre, unas cien mujeres esperaron toda la mañana con la esperanza de que les ayudaran con maíz y frijol.

Las autoridades les dijeron que podrían apoyarlas con solo cinco libras de maíz, lo que para ellas era más que suficiente.

A pocos kilómetros de la comuna, en la aldea Hierba Buena, Paola Marroquín, quien no sabe si tiene 9 o 10 años, apenas tiene cabello, pues se le ha caído, como consecuencia de la desnutrición severa.

Virgilia Argueta, tía de la niña, aún atribuye ese problema físico a que esta acaricia a perros y gatos.

Paola tiene dos hermanos. Los tres comen lo que encuentran o lo que les da su tía, ya que la madre sale a trabajar y el padre siempre está ebrio.

Esta pequeña no es la única desnutrida en la aldea. En la vecindad de su casa, Kelly y Ana Roselia Pérez, de 10 y 11 años, respectivamente, cuidan a su hermano Carlos, de 1 año, que aún no se levanta de la cama ni para sentarse, ya que su peso es muy bajo y está desnutrido.

Esos niños son parte de una familia numerosa, con 13 hijos. La madre, Anabelli Junái, sale a trabajar al campo porque lo que gana el esposo no les alcanza para comer, a lo que se suma que este año la siembra no dio lo suficiente para guardar algo de granos.

Junái tuvo mejor suerte que su hermana Marta, quien tiene ocho hijos y su esposo la abandonó, por lo que a los más pequeños los cuidan los más grandes mientras ella trabaja.

Ambas familias viven en casas construidas con adobe y varas de bambú.

Subregistro

Huehuetenango tampoco escapa de la desnutrición. En Aguacatán hay cuatro casos ubicados, y pobladores consideran que podría haber más.

Gerson Hernández, de 4 años, es un ejemplo. Su madre, Juana Bernal, no habla de desnutrición, sino que se queja de que siempre está enfermo con fiebre y diarrea, “y nunca crece”.

Ella muestra su cocina, donde con un poco de fuego en el suelo cocinó yerbas para el desayuno y huevos al mediodía. ¿Cena? No hay.





sábado, 30 de abril de 2011

Mouseland

Respuesta a CACIF ante amparo interpuesto

Estudiantes piden cambio de autoridades educativas

 


Estudiantes de la Escuela de Formación Agrícola de Sololá tomaron las instalaciones del edificio escolar, en protesta por supuestas anomalías cometidas por el director y la subdirectora del establecimiento.

Los disconformes exigen la destitución de Moisés López García, director, y de Saida Sánchez Arévalo, subdirectora.
Las autoridades del establecimiento son señaladas de supuesta malversación de fondos, pérdidas de ganado y utilización de bienes del establecimiento para actividades de proselitismo político.
Álex Salazar, coordinador del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación, manifestó que investigarán el caso para comprobar si se cometieron las supuestas anomalías, y proceder, ya que para darle solución al problema deberán confirmar los señalamientos.
Según padres de los estudiantes, brindarán apoyo a sus hijos, ya que ellos conocen de cerca los problemas, tienen derecho de manifestar y a exigir una buena administración.
Los manifestantes aseguraron que si sus demandas no son cumplidas tomarán medidas legales para que se destituya a los señalados.